Sí, ya es hora de pasar revista aquí de los videojuegos que me han acompañado durante el verano. Videojuegos que recomiendo efusivamente jugar, porque son joyas de ayer y de hoy que nadie debería perderse.
· Final Fantasy Tactics Advance 2
Siguiendo el camino marcado por FFT (para PS) y FFTA (para GBA), FFTA2 aumenta las posibilidades de este último con dos nuevas razas, más hechizos, más oficios/clases, más leyes (tan odiadas en el primero, pero esta vez consiguieron arreglarlo). Además, ¡tiene una explicación decente de por qué no se muere en combate! (XD). En definitiva, más de lo mismo, lo que garantiza buenas horas de diversión para cualquier jugador de los anteriores (yo llevo 60, pasado el final y aún así sumando. Y eso que no soy la típica persona que se saca todos los oficios al máximo, todas las armas, todas las misiones...). La lástima es que este juego no tenga una gran historia principal y que sus secundarias no tengan tampoco un gran nivel, aunque sí es destacable que todas estas se vayan juntado a medida que las vas completando.
· Super Mario RPG
Ha dado la casualidad que justo la semana en que lo han sacado en la consola virtual de Wii. Por mi parte me he tenido que conformar con jugarlo en formato ROM, ya que en su día no salió para Europa y ni siquiera conocía la existencia de dicho juego antes de meterme en sheikav.
¿Qué decir del juego? Es, aún con su no salida en Europa, un verdadero clásico de Snes que da buena muestra del potencial de la consola desde el punto de vista gráfico (pseudo-3D que me recordó a lo visto en Super Mario 64), pero también con una historia bien narrada, con grandes momentos cómicos y un toque de RPG distinto a todos los demás; salvo inevitablemente a sus, por así llamarlas, secuelas: Paper Mario, Paper Mario 2, Mario & Luigi... La posibilidad de infligir más daños y recibir menos le da un toque dinámico a sus combates, aunque peca de no acabar usando muchos ataques especiales, ya sea por lo limitado a veces de estos como lo innecesario, ya que con los ataques normales se inflinge buena cantidad de daño. Al final yo acabé usándolos casi exclusivamente para la curación.
Por cierto, sin decir ni mucho menos que se parezcan, su batalla final me recordó a la que tuve contra Meta Ridley en Metroid Prime: esta vez fue un largo combate en el que acabó cayendo mi sanador/a (no os diré quién es), dejándome a Mario y otro compañero solos en la pelea. Sufriendo dos ataques globales del enemigo que me dejaron con (aprox.) 10 y 12 de vida respectivamente, pero que fueron suficiente para acabar derrotando al enemigo con un último golpe de Mario.
Próximo: Mario Strickers...
jueves, 28 de agosto de 2008
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